Los SMS entre Rajoy y Bárcenas

www.elmundo.esEduardo Inda | Esteban Urreiztieta | Madrid
  • El presidente mantuvo contacto directo y permanente con el ex tesorero
  • Durante ese tiempo le pidió que negara la contabilidad B y los sobresueldos
  • 'Luis, nada es fácil, pero hacemos lo que podemos. Ánimo', le comenta
  • Luis Bárcenas guardaba silencio por el apoyo que le prestó personalmente el presidente. Mariano Rajoy mantuvo un contacto directo y permanente (como mínimo, de mayo de 2011 a marzo de 2013) con el ex tesorero y le pidió que negara la contabilidad B y los sobresueldos. Así lo atestiguan los SMS que se intercambiaron y numerosas conversaciones, telefónicas o cara a cara. En esta relación también participó Rosalía Iglesias, mujer del ex tesorero.
    En estos SMS se observa cómo en 2012 Rajoy intentó calmar a su interlocutor cuando las cosas se pusieron feas: "Luis, nada es fácil, pero hacemos lo que podemos. Ánimo". Y, ya en 2013, exactamente el día en que EL MUNDO destapó el escándalo de los sobresueldos y 48 horas después de conocerse las cuentas suizas, el presidente instó a Bárcenas a "ser fuerte" y le expresó su comprensión.
    Los SMS que hoy publica EL MUNDO –todos los que se le han facilitado– son una pequeña parte del total. Bárcenas ha puesto especial interés en su difusión después de que su antiguo partido le definiese el jueves, por boca de Alfonso Alonso, como "un delincuente que ha hecho de la mentira su estilo de vida".
    Luis Bárcenas guardó silencio durante años, desde que estalló el caso Gürtel hasta tiempo después de que se conocieran sus cuentas suizas y el escándalo de los sobresueldos, por el apoyo que le prestaba personalmente Mariano Rajoy, primero en calidad de presidente del PP y después en su doble vertiente de jefe del Ejecutivo y del partido en el que se sostiene.
    Así lo prueban, por ejemplo, las decenas de mensajes de texto telefónicos que se intercambiaron el ex tesorero y también su mujer, Rosalía Iglesias, con el número uno del partido. En estos SMS se demuestra que Rajoy ha mantenido un contacto permanente y directo con Bárcenas desde hace al menos dos años. Mensajes telefónicos, llamadas y entrevistas personales en las que el presidente le pedía paciencia una y otra vez, que lo negase todo; en definitiva, que no tirase de la manta.

    Bárcenas, a la cárcel por riesgo de fuga


    El juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz ha acordado enviar a prisión sin fianza al extesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas, tras aparecer nuevas pruebas que le pueden llevar a huir de la Justicia. Después de cuatro años desde que fue imputado, el instructor, a petición de la Fiscalía Anticorrupción, considera que es el momento de que vaya a la cárcel madrileña de Soto del Real.
    Bárcenas ha recibido la noticia con entereza aunque ha afirmado estar "desconcertado" ya que no entiende cómo han tenido que pasar cuatro años para tomar esta decisión. Su abogado ha anunciado que presentará un recurso de apelación ante la Sala al tiempo que ha señalado que tener 40 millones en un banco "no es ningún delito".
    El juez entiende que desde la última vez que le tomó declaración hasta hoy hay nuevos hechos que pueden incrementar de “forma evidente y sensible” un riesgo de fuga. “El ingente acervo acumulado al presente estadio procesal respecto del imputado acerca de su participación en diversos delitos sancionados todos ellos con penas de prisión de diversa duración, en algunos supuestos de hasta seis años de prisión, ha puesto de manifiesto que a día de hoy deben ser tenidas en cuenta nuevas circunstancias respecto a Bárcenas, y cuya incidencia el presente procedimiento no se puede obviar”.
    A pesar de que Bárcenas ha cumplido con las medidas impuestas como la comparecencia quincenal en la Audiencia Nacional o la prohibición de salir del país, tal y como ha alegado su defensa, para Ruz la prisión ahora es esencial para “garantizar la conservación de las fuentes de prueba evitando su alteración o perturbación por parte del imputado”.


    Para el instructor es esencial que de lo instruido hasta la fecha todo hace indicar que tiene más cuentas en el extranjero, como en Estados Unidos y Uruguay, y tiene que ser tenido en cuenta como un elemento más a la hora de valorar la posibilidad de que pueda fugarse y ante la proximidad del juicio oral, “contando con medios económicos para facilitar su huida, en atención al patrimonio que se le presume y que, al presente momento se constata como de difícil intervención judicial”.
    Ruz expone como nueva prueba la supuesta compraventa de una obra pictórica por 500.000 euros por parte de la mujer de Bárcenas que la marchante Isabel Mackilay desmiente. Reconoció encontrarse con Bárcenas cuando éste lo ha desmentido, al asegurar que fue un negocio de su mujer. Este jueves el extesorero negó la validez de las manifestaciones de la testigo aduciendo que padece una enajenación mental. A pesar de que hay prueba de que Bárcenas voló Buenos Aires, donde reside la marchante, él sostiene que se reunió con unos empresarios, aunque no les ha identificado.
    Asimismo, las comisiones rogatorias remitidas por Suiza sobre las cuentas bancarias de Bárcenas en el Dresdner Bank y en el Lombard Odier confirman los indicios “hasta el momento mantenidos respecto del presunto delito de blanqueo de capitales atribuido al imputado, al tiempo que se ponen de manifiesto elementos indiciarios adicionales a los hasta ahora valorados para sostener la imputación por diferentes delitos contra la Hacienda Pública en los ejercicios 2002, 2003 y 2007” además de la imputación por cooperación necesaria en la defraudación del IRPF de 2006 correspondiente a su mujer Rosalía Iglesias.
    Modus operandi
    El juez describe el modus operandi para blanquear dinero. Primero, se trata de una fase de integración o colocación de los fondos obtenidos derivados en parte de las comisiones generadas por su participación en unión del imputado Francisco Correa en las adjudicaciones de contratos púbicos realizadas a empresas afines. Después, va una segunda fase de encubrimiento o estratificación, consistente en la desvinculación del origen de los fondos procedentes de las actividades delictivas. Y por último, desarrollaba una fase de integración de los fondos ya blanqueados y su retorno al sector de la economía real del que provenían.
    Para todo este proceso, el imputado, según el juez, se vale de la utilización de presuntos testaferros como el también imputado Iván Yáñez así como de estructuras societarias complejas y opacas, actuando como sociedades pantalla y apareciendo desvinculadas de beneficiario real.
    Tal incremento patrimonial recogido en las comisiones enviadas por Suiza “aparece carente de justificación a través de negocios jurídicos o actividades comerciales lícitas en las que conste acreditada la intervención del imputado”.
    Según recoge el auto, del análisis de sus cuentas en el Lombard Odier se recoge que todas ellas presentan un comportamiento “homogéneo, nutriéndose nuevamente a través de múltiples ingresos en efectivo, transferencias bancarias y otros abonos mediante bonificaciones o compensaciones, para posteriormente invertirse los montantes en valores en valores mobiliarios”.www.elconfidencial.com/.../

    La amenaza Bárcenas resucita las guerras internas en el PP

    ELPLURAL.COM | 20/01/2013
    Lejos de lo que podría esperarse, que ante la amenaza de esa bomba de relojería que es Bárcenas, el Partido Popular uniera sus fuerzas para defenderse y sobre todo, proteger al líder, al parecer está ocurriendo todo lo contario y los enemigos políticos de Rajoy dentro del partido, que en 2008 intentaron desplazarle, ven ahora su oportunidad para una revancha. Fuentes de la formación, citadas por ‘El País, ofrecen claves de cómo está viviendo el PP esta crisis, en la que la retirada, a medias, Esperanza Aguirre está desempeñando un papel destacado.
    Inquietud en el PP
    En el PP hay “inquietud, desconcierto y preocupación” . Primero porque las revelaciones sobre los 22 millones de euros en Suiza de Bárcenas, hombre clave en las finanzas del partido durante dos décadas, condena al partido al descrédito. Segundo, porque se empieza a hablar ya de guerra interna, como sucedió en aquel Congreso de Valencia de 2008.
    Hay algunos que no aceptan a Rajoy
    Un dirigente nacional cercano a Rajoy ha dicho a El País lo siguiente: “Aquí lo que está pasando es que hay una serie de personas clave, dentro del PP y en algún medio de comunicación, que siguen sin aceptar que Rajoy ganó aquel congreso de Valencia en 2008 y ahora, como entonces, quieren poner en marcha una operación para debilitarle”.
    La cena en Almería
    Rajoy mantuvo el viernes una cena con un grupo selecto de sus colaboradores en Almería, a donde se había desplazado para participar en la Intermunicipal del PP. Varios de los asistentes a esa cena comparten la tesis manifestada anteriormente.
    Una maniobra a la desesperada de Bárcenas
    Otras fuentes, sin embargo, se centran en Bárcenas y creen que es él que ha montado esta operación para amenazar a Rajoy con el objetivo de que intervenga y le saque del atolladero jurídico en el que se encuentra. El extersorero ha acusado a la Fiscalía y a la Abogacía del Estado de perseguirle. Se trata de una maniobra a la desesperada para chantajear al líder del PP, sostienen esas fuentes.
    La reaparición de Aguirre
    Y en medio de todo esto la reaparición de Aguirre, la otra cara de la moneda en aquel lejano Congreso de Valencia en 2008 cuando la política popular tenía la ambición de ponerse al frente del partido. La expresidenta madrileña ha estado muy presente esta semana en los medios de comunicación y no precisamente para ayudar a Rajoy, sino más bien para ponerle en evidencia. En varias entrevistas ha repetido que a ella no le “tembló el pulso” para destituir a sus implicados en la Gürtel en Madrid -Rajoy protegió a Bárcenas por más de un año, le pagó las costas de su defensa y le dejó un despacho en Génova. Además, Aguirre se mostró “muy sorprendida” de que nadie supiese nada de las fechorías de Bárcenas y pidió que el partido habrá una investigación interna, dejando lugar a la duda. A la dirección nacional del PP no le ha gustado nada la actuación de la aún líder de la formación en Madrid.
    Cada palo con su vela
    La estrategia del PP por el momento es negar todo y, sobre todo, salvar a Rajoy. En ese sentido, su número dos en el partido, Cospedal, ha advertido que “cada palo aguante su vela”. Una expresión que parece dirigida a los que le precedieron (Javier Arenas, Ángel Acebes y Francisco Álvarez Cascos) y con la que pretende distanciar a su jefe y a sí misma de la expuesta caja B y los sobresueldos en negro. Pero Rajoy no acaba de aterrizar en el partido, donde ha sido de todo: responsable de campañas, organización, vicesecretario, secretario general y presidente, con Bárcenas de tesorero, por cierto. El Mundo publica hoy que Rajoy y Cospedal acuerdan revisar la gestión de Bárcenas en la tesorería.
    Esta crisis beneficia a Aguirre y, sobre todo, a González
    Las fuentes citadas por El País sostienen que, en cualquier caso, a Aguirre y su sucesor, Ignacio González, les viene de perlas que Rajoy salga debilitado de este escándalo ante la complicada situación que se va a abrir en el PP de Madrid ante la elección de los candidatos al Ayuntamiento de la capital y a la Comunidad. Los próximos a Rajoy especulan con que la alcaldesa, Ana Botella, e Ignacio González podrían tener pocas opciones de repetir.

    Despacho abierto en Génova 13

    El extesorero del Partido Popular pagaba sobresueldos en dinero negro a cargos del partido, según fuentes de su entorno

    La cúpula del PP entró en estado de choque al conocer que Luis Bárcenas tenía 22 millones en Suiza. ¿Qué hacer? El equipo de confianza de Mariano Rajoy, principal afectado por el escándalo, porque él fue quien aupó a Bárcenas de gerente a tesorero y quien decidió defenderlo un año entero —nunca llegó a echarle, él dimitió—, tomó una decisión rápida. Pedir perdón no está en su estilo, querellarse contra él era arriesgado —Bárcenas conoce todos los secretos de las finanzas del PP de los últimos 20 años—. Así que optó por una estrategia muy marianista: “Bárcenas no es del PP”, fue la consigna desde el miércoles. “No tiene nada que ver con el PP, este es un asunto privado”, repetían sus portavoces, incluida Dolores de Cospedal, la cara visible del partido ante la ausencia, una vez más, del presidente. Cospedal y los suyos trataron de convencer a sus indignados votantes de que el PP había roto por completo en 2010 con su extesorero. Pero la realidad es bien distinta.

    La acumulación de esos 22 millones de euros en Suiza se produjo mientras Bárcenas era gerente y tesorero del PP y Rajoy presidente. Pero no solo eso. Después de que formalmente el PP rompiera con él, aceptara su petición de suspensión de militancia y su entrega del acta de senador, en abril de 2010, Bárcenas ha seguido entrando y saliendo con absoluta normalidad y mucha frecuencia, según varios dirigentes, de la sede nacional del PP, la que fue su casa, en la calle Génova de Madrid. El extesorero, lejos de haber sido declarado persona non grata en esa sede, la visitaba —al menos hasta el miércoles— con la frecuencia que él quería, que era mucha. Se encontraba por los pasillos con dirigentes, les pedía cosas, trataba de buscar ayuda para sus asuntos judiciales y sus actividades económicas, que siguen siendo muy importantes. Muchos comentaban en privado la presencia de Bárcenas, que les seguía sorprendiendo. Pero nadie se animó a decirle que no fuera más, ni siquiera el único con autoridad para hacerlo: Rajoy.

    Bárcenas, una persona clave en la estructura del PP incluso cuando todavía era AP, y cercana tanto a Rajoy como a Javier Arenas y a otros muchos dirigentes históricos, en especial Francisco Álvarez-Cascos, entraba hasta este miércoles con tanta naturalidad en la sede de Génova que tiene allí incluso una sala dedicada en exclusiva a sus cajas de documentación, la sala Andalucía. Cospedal y Bárcenas protagonizaron en 2010 un rocambolesco episodio a cuenta de esa sala. El extesorero tapó el cristal con cinta oscura para que nadie viera qué había dentro, y ella ordenó despegar la cinta. Ahora las cajas están a la vista de todos en la sede.

    Cospedal, que fue la que más directamente se enfrentó con él en la etapa cumbre del caso Gürtel, permitió sin embargo que, por orden de Rajoy, a Bárcenas se le pagara el abogado que le defendía. Cuando EL PAÍS publicó este trato de favor, Cospedal logró su objetivo y el PP dejó de pagar al letrado, aunque este reclamó 200.000 euros por los gastos hasta ese momento. En teoría, el PP también le quitó el coche oficial. Sin embargo, la mujer del extesorero acudió a la Audiencia Nacional a declarar en ese coche, que siempre usó su marido, con el chófer del PP. Algunos dirigentes señalan que Bárcenas sigue usando un coche del partido cuando lo requiere. En el PP lo niegan tajantemente, aunque ya en el pasado el extesorero ha dado muestras de tener más control de los engranajes del partido que sus propios dirigentes. No en vano conserva a familiares y amigos en la sede.

    Lo que no se animan a negar las fuentes oficiales es que la secretaria de siempre del extesorero sigue llamando en su nombre desde la sede Génova, donde ella continúa trabajando para el partido. Esto es, para la gente de fuera con la que Bárcenas se comunica, él sigue llamando desde la calle Génova y con su secretaria de siempre, como si aún trabajara en el PP. Este tipo de trato de favor, que indigna a muchos dirigentes, demuestra que la imagen que la dirección ha querido dar de ruptura total con el extesorero desde hace mucho tiempo no se corresponde con la realidad hasta el miércoles. Nadie sabe si por miedo o por desidia, Bárcenas ha seguido haciendo casi lo que quería en la sede de Génova.

    Sin embargo, la indignación producida tanto en la calle Génova como sobre todo fuera de ella hace pensar que este tipo de trato de favor no se repetirá. Bárcenas no ha pisado la sede esta semana, aunque sus cajas de documentos siguen allí. Él siempre se ha jactado de haberse llevado a su casa hasta nueve cajas de material sensible. Esa es su gran arma, insistía en privado, por eso nadie le toca. La cosa llegó tan alto que Rajoy tuvo que desmentir una extorsión de su extesorero: “A mí Bárcenas no me ha chantajeado”, dijo en julio de 2009.

    Ahora Rajoy asiste estupefacto, según algunos de los suyos, al espectáculo de que el hombre que ha controlado durante 20 años el dinero del PP —público en un 90%, ya que deriva de subvenciones—, al que él designó como tesorero, acumuló en Suiza, con Rajoy de presidente del PP, 22 millones de euros opacos. Y por si fuera poco, su abogado dice que regularizó 10 de ellos ya con Rajoy en el Gobierno durante 2012. En el entorno del presidente aseguran por activa y por pasiva que ese dinero es de Bárcenas y no tiene nada que ver con la financiación del PP. Pero el incendio es de tal calibre que esa estupefacción de Rajoy, que sigue en silencio, se transforma en indignación de muchos de los suyos.

    Buena parte del entorno del PP espera algo más que esa sensación de “sorpresa” de Rajoy que trasladan las fuentes oficiales. El presidente tiene previsto romper hoy en Almería su silencio.

    En el PP algunos hablan del día de la marmota. De repente, parece como si todos los escándalos de 2009, que Rajoy dejó pudrir confiando en que el tiempo los resolviera, hubieran reaparecido en la misma semana. El escándalo de los espías —Rajoy ordenó a Cospedal en 2009 una investigación interna que después ambos dejaron en nada— ha vuelto al primer plano con la confesión de uno de los espías, que apunta directamente a Ignacio González, nada menos que presidente de Madrid, como ordenante del espionaje entre otros del actual ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, y la actual delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes. Y Rajoy no dice ni una palabra, ni toma ninguna decisión. Los suyos insisten en que llegado el momento impedirá que González sea candidato, pero nadie lo tiene claro.